Hoy me desperté,
para variar,
hoy todo volvía a ser como ayer,
anoche descubría,
en un rincón,
el olor de amaneceres,
de besos con sol,
del después de lo que se acabó.
Hoy escapo de sombras
en pretérito imperfecto,
que me quiero esconder
en la primera esquina,
por ahí vienen los hados
- ey tú, manos arriba -
- tranquilo, voy desalmado-
y echo a correr,
que me pilla el tiempo,
vamos cariño,
que aún queda calle
y yo no pienso ir patrás
aunque sea a contraviento.
jueves, diciembre 21, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Hay un pensamiento triste como el cuarto de la plancha y eres tan bonito que no te lo van a perdonar...
La rosa tiene su espina, la suerte sus altibajos.. ni yo entiendo tus movidas, ni tus mis discos..
Publicar un comentario